sábado, 17 de diciembre de 2011


Casi finalizando 2011 recuerdo con nostalgia un año raro, donde la palabra crisis se ha estampado con impopularidad entre las voces de los indignados de todo el mundo. Un año en el que a pesar de todo, las esperanzas han marcado mi hoja de ruta, un año para agradecer a Dios por darme más tiempo con mi papá y porque he tenido la ayuda y comprensión de mi amado Tetitar, de mi mamá Olguita y de mis hermanos Richi y Lilito.
Un año para agradecer, reir y llorar!!